Como siempre esto empieza y comienzo a comer, a ver si alguna cosa que coma me ayuda... me como dos dulces, un rollito de canela y dos galletas y aparte del ahogo por la rapidez, nada pasa (últimamente engordo, antes no pasaba eso).
Decido seguir con mi rutina, hoy tengo cosas que hacer.
Me meto a la ducha, me desespero y empiezo a sudar, me ahogo, empiezo a dudar; le bajo la temperatura al agua y aún así la sensación no pasa >____<
Sé que no es la primera, ni la segunda vez que me pasa, ya perdí la cuenta de las cuantas veces ha pasado antes, pero ahora no me puedo arrancar ni hacer bolita en la cama porque tengo al enano sentado en su silla a metros de mí y me sonríe. Pienso en cuanto odio esto, en cómo me gustaría que esto se acabara y no me limitara más, porque en serio que esto es limitante.
Pongo agua para un té y empiezo a escribir.
Por qué escribo?? Porque no sé qué hacer, porque no me puedo calmar, porque esto no pasa y siento que me voy a morir ahogada o de un paro cardiaco, porque me tomo el té y no funciona y me dan mil ganas de tirar la taza al muro... Y lo único que me calma es ese enano comedor de galletas que está en su silla, porque si no estoy para él significa que esto me gano y hasta ahora creo que soy una luchadora y jamás daré mi brazo a torcer.
Por ahora a detener todo, a posponer lo que teníamos que hacer quizás una hora, quizás menos o más... hasta que esto pase y yo vuelva a ser la misma de siempre, sonriente y loca, porque por ahora solo soy loca y no es bueno.
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